
Unos palitos de naranja bañada en chocolate, una golosina o un bocadito de placer…
Desde que el chocolate, o mejor dicho el cacao, llegó a Europa hace más de quinientos años, ha generado desde preciosas historias hasta serias teorías sobre la adicción que produce.
Lo que parece ser cierto es que el chocolate estimula la producción de endorfinas, y en cierta medida nos quita la ansiedad y nos levanta el ánimo…

Son muy sencillos de preparar, unas virutas de piel de naranja, se confitan en un almíbar fuerte (punto de bola), se secan en el horno a 80-90º.

se bañan en cobertura fundida. Se dejan sobre la rejilla hasta que el chocolate esté duro.
Aquí os dejo un platito , no vayamos a deprimirnos por falta de chocolate…

Os apetece uno?

