


8 y media de la mañana, arrastrando el cuerpo entro al comedor, miles de manjares en mi presencia y ¡¡lo que yo daría por una almohada!! pero, estoy en Valencia con las colegas, aquí los dias solo tienen 24 horas, no podemos perder el tiempo, ya dormirás behbeh el lunes, que total, solo tienes que ir al trabajo (que no es lo mismo que trabajar

Me siento con mi zumito, empiezan a aparecer caras conocidas, todas sentadas, quietas....¿que pasa?...coñe, ¡que nos falta Encarnasao! ¿o quien pensabais que nos iba a poner el desayuno?




Allí desfilaban frutas, quesos, bollería de esa industrial llena de aceites y grasas malas, beicon, salchichas, embutidos, zumos....y mucho café, no sé porqué, pero mucho café. Encarna muy atenta, mesa por mesa preguntando si queriamos algo más, pendiente de su clientela, que como estaba el tiempo, que que tal habíamos dormido.... y os preguntareis, ¿y dónde estaba Nacho?...y eso mismo nos preguntabamos nosotras....
Una hora después, porque despachar todo aquello lleva un rato, Encarna llamó al servicio para que recogieran las mesas, ¡que eficiente esta mujer!, ¡que bien nos atendió! yo, de verdad, casi que repetiría todos los dias (pero de verdad de la buena

Y así, más allá de las 10 de la mañana (ni idea de que hora era ya, pero pasaba de las diez fijísimo



Subidas en autobús, la azafata-acomodadora conocida como canelona, allí se nos puso en medio a dar las instrucciones éstas de: se me aten todos, las salidas de emergencia están en sus laterales...bueno, que os la imaginais perfectamente y sino, a las fotos me remito, que en más de una sale.

Arrancar el bus y os preguntareis: pero...¿dónde está Nacho?.....lo mismo que nos preguntábamos todas...

Por resumir, visita turística a Valencia con guía de verdad y todo, ciudad que tenía en mente visitar algún dia con la family, pero que ahora tengo ya claro que algún puente iremos, es preciosa, muy cuidada, un barrio antiguo conservado, monumentos dignos de ver y hemos aprendido el porqué del dicho "dormir a la luna de Valencia", pero la que no fue se lo perdió, y yo no lo pienso explicar, ¡hay que ir!.
Anécdotas de la jornada: eramos un grupo único de 50 que, tan pronto hicieron parada de bus para compras, ya no fue posible conservar unido


De vuelta al autobús y ya con caras de cansadas, después de recoger a tres chicas que encontramos abandonadas, una creo que llevaba los ojos algo pintados


...y nos fuimos a comer...a un lugar precioso mirando el mediterraneo (el mar lo vimos después de la cola del baño para hacer un pis todas, porque somos ya como el inserso, necesitamos programada la parada de baños

Antes de entrar al local, Mjmix empezó a desempaquetar un enorme bulto amablemente transportado en el viaje por Pepe, costillo de Jalapa (es que para algo dejamos venir a los costillos







¿y no sabeis a quien conocimos en la comida?...a una muñequita llamada Ona, que si en las fotos sale bonita, ni imaginais la realidad. Pobre bebé, de brazo en brazo, posando con todas, su tiaabuela encarna que no la soltaba y una apariación llamada Nacho (¡¡es que Nacho vino a comer con nosotros, ¡bien!!!) casi llorando porque no esta con su niño.
Paella hubo, o arroz caldoso, a elegir, en la tierra del arroz no podía ser otro menú. Y, en medio de la comida, nos pusieron babero a todos. Decían allí que era por si manchábamos al vecino al apretar los cangrejos, pero yo que soy muy lista sé que era un encargo de nacho, alejado de su bebito, para ponerse en ambiente


y comimos, y hablamos, y hablamos y comimos.....(y algunas compramos, al morito que traia pulseras y llaveros a las mesas). El pobre autobusero, que nos había avisado muy seriamente que nos recogía "a las cinco en punto o marchaba", pues ya imaginais que tuvo que marchar, porque la puntualidad no es nuestro valor


Subidos al bus, surgieron dos grupos: las más atrevidas, audaces y sin miedo al agotamiento, bajamos pocos minutos después siguiendo a Mjmix para dar un paseo y conocer la malvarrosa (creo que se llamaba así) y el puerto deportivo, todo precioso, que os voy a contar, imaginarlo en verano tiene que ser espectacular...(en este paseo, como es habitual, Marasti de nuevo se perdió

¡¡¡Llovió!!! si, nadie lo quiere reconocer, pero llovió cinco minutos!!!


El grupo audaz regresamos al hotel en taxi, grupos de cuatro, menos el grupo en que viajaba Lauma, que tomaron un avión, porque aún hoy no consenguimos entender como saliendo los últimos, llegaron al hotel los primeros, eso si, con una cara de susto que pa qué, creo que vieron Valencia a velocidad de gacela


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Y así transcurrió el sábado, porque poco más hay que contar...unos modelitos....una cena corrientita....unos pasos de baile....y para cama que estábamos todos muy cansados ya
