Ya sabes, cuida bien todo, no vaya a pasar algo.
No se preocupe patr?n, que nada va a suceder.
No s?, es que tú eres bien bruto.
Dos semanas después vuelve el hacendado.
Y, Cholo, ¿Alguna novedad?
No patroncito, nada ha pasado.
¿Estás seguro? Que tú eres medio bruto.
Bueno, ahora que lo dice, sí pasó algo, se muri? su gato.
?Mi gato de angora! ¿Cómo que se muri? mi gato?
Se muri? de indigesti?n.
¿Cómo que de indigesti?n? Si sólo comía atún y caviar.
Es que comi? carne de caballo.
¿Qué caballo?
Su caballo pues patr?n, es que se muri? y había que aprovechar la carne.
?Bruto! ¿Qué pasó con mi caballo de paseo?
Se muri? del esfuerzo.
¿Qué esfuerzo?
Pues de cargar agua.
?Agua! ?Para qué?
Para apagar el incendio.
¿Qué incendio?
El de su casa, pues.
?Mi casa de campo? ¿Qué le hiciste a mi casa!
Nada, se quemó por la vela.
¿Qué vela?
La del velorio de su esposa.
?Mi esposa infeliz! ¿Qué le pasó?
Se muri? de la impresi?n.
¿Qué impresi?n?
?S?! De la impresi?n de ver a sus hijos ahogarse.
Y el hacendado le empieza a retar al capataz cuando éste suplicando dice:
?Ya no más! ?Ya no más patroncito! De haber sabido que se iba a poner así, no le contaba lo del gato.
***************
Un empresario multimillonario tenía entre sus míltiples valores, miles de hectúreas de tierras f?rtiles, cientos de miles de cabezas de ganado fino y una preciosa hija de 18 años heredera de todas sus riquezas. Un día nuestro millonario organiz? una reunión en su mansi?n a la cual invitú a toda la alta sociedad del país, y al llegar la media noche, descubri? una piscina de 500 metros con las paredes extra altas en tres de sus lados, en los primeras 100 metros de la piscina había colocado pira?as sudamericanas, en el segundo tramo cocodrilos del Africa, luego barracudas del caribe, después anguilas el?ctricas y finalmente tiburones australianos.
Nuestro hombre reuni? a todos sus invitados en uno de los extremos de la piscina y les dijo:
Creo que la juventud está perdida, ya no hay hombres en este mundo, por eso si hay un macho en esta fiesta, lo reto a cruzar esta piscina. Al que lo haga le daré a escoger entre la mitad de mis tierras, el 50% de mi ganado o la mano de mi única hija y heredera. No había terminado de hablar el empresario cuando un joven se lanza a la piscina, la cruz? y salió por la otra orilla, el viejo emocionado le dijo:
Nunca creí ver valor c**o éste antes de morir, dime muchacho, ¿Quieres la mitad de mis tierr así
No, contestú rápidamente el joven.
Entiendo lo que quieres, es el 50% de mi ganado, razon? el millonario.
Tampoco, replic? el joven.
Ah, lo que quieres es ser mi yerno, y único heredero.
No quiero nada de eso, grito el muchacho.
Y entonces, ¿Qué quieres? Preguntú confundido el millonario.
Quiero saber, ¿Quién fue, el que me empuj? a la piscina? data-ad-format="auto" data-full-width-responsive="true">
