Esta receta me la hizo mi buen amigo Xurxo:
Lomo de Soosita al horno.
(Dificultad: *****)
(No les daréa esta receta si creyese que soy capaz de prepararla yo mismo)
1- Escoja la pieza con detenimiento, demor?ndose en la b?squeda de un trozo de carne tierno pero con fibra. No será difícil de encontrar, aún así dem?rese.
2-Extraiga la pieza en vivo, dibuje el contorno con besos y recorte a mordisquitos de flores, anestesiando la zona con su propia saliva. Lave cuidadosamente su zona oscura con abundante agua bendita y unas gotitas de f?.
3-Adobe del modo siguiente:
Versos cortados en juliana (sea generoso)
Una pizca de corazón de drag?n (espabile hombre, busque en su despensa, detr?s de la caja de galletas)
Unos grumos de memoria, bien batidos hasta deshacerlos. Desleídos en lagrimas dan un toque agridulce al plato (opcional).
Albahaca y romero.
Aceite puro de ilusiones y un chorrito de vino espiritual (D?jese aconsejar por su alquimista).
4-Deje reposar el adobo en un lugar cálido y en penumbra, bajo sus brazos si puede, hasta que la pieza se ponga un poco nerviosa e inquieta. Intr?guela incluso.
5-Haga un corte (profundo) y rellene con fant asías de campos verdes, bosque, un poco de cerdo (no se sonroje al hacerlo), un ladrido fiel y una pesadilla. Ci?rrela y ?tela en corto con un hilo de Bramante (no sea cutre ni se ande con bromas, que está hecho de autentica arquitectura renacentista).
6-Pinte la pieza con la caricia de un niño. De ese modo las zonas duras quedarén más blandas y sabrosas
7-Meta el lomo al horno en una bandeja amplia y cómoda (ella no dejar? de moverse), lo mejor es una cama pero no suele caber en los hornos de hombres solos. No precaliente ni encienda el horno, no se preocupe, alcanzar? la temperatura míxima el solito.
Mantúngalo así durante cuarenta días con sus noches, mientras canta, recita el gui?n de la fiera de mi niña a modo de mantra , se mata a pajas y cuida de sus cosas c**o si fuera un hermano. G?nese su confianza.
Abra el horno y acar?ciela cada diez minutos. Si se quema se jode o no haber empezado, por aquí ya han pasado suficientes cobardes.
Rectifique de cariño y roc?e con un chorro de promesas que pueda cumplir (ojo que si son promesas incumplidas el asado se agria c**o si le hubiera echado vinagre) y un vasito de su propia sangre.
Sonr?a.
8-Truco: Deje en el horno una tacita de besos durante la cocción y conseguir? que la pieza se haga sin resecarse.
Degustaci?n:
Sirva en su mejor vajilla
Aunque a usted le parecer? innecesario este asado siempre agradece una sopa de letras c**o entrante y una guarnici?n de besos de flores, verduras y frutas varias.
C?malo bajo la mirada atenta de la propia Soosita, mientras le habla de amor, de lunas, de los secretos de los caballeros del Temple, de Mont Saint Michel, de lugares lejanos que se acercan pese a no haber existido nunca. H?gala re?r, siempre h?gala re?r.
Ahora ya la tiene dentro, forma parte de s?, déjela fluir, disfr?tela. Es carne de su carne y sangre de su sangre. En la sobremesa acaricie y bese su espalda hasta conseguir restituir las partes previamente cocinadas e ingeridas.
Si todo ha ido bien ella se encargar? del postre y del resto de su vida. No sea imbecil, quédese a desayunar dando la importancia justa a lo sucedido durante la noche porque mañana será mejor. data-ad-format="auto" data-full-width-responsive="true">
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