CALAMARES.- Para que no te resulten duros en un baño de leche cruda unas dos ó tres horas.
Patatas fritas crujientes: Para conseguirlo, primero fríe las patatas en aceite bien caliente y luego baja el fuego. Conseguirás que crujan por fuera y que se queden tiernas por dentro.
Conservar los ajos: Pélalos, tritúralos y añádeles un poco de aceite de oliva. Durarán más de un mes en la nevera.
Pelar los tomates sin cuchillo: Cuece los tomates en agua hirviendo durante dos minutos. La piel se quedará casi suelta y podrás retirarla con los dedos.
Lechuga ligera: Si quieres que las hojas de lechuga no estén pastosas, ponlas varias horas en agua con hielo. Después escurre bien el agua.
Exceso de sal: Si te pasas con la sal en un guiso, puedes arreglarlo pelando una patata y cociéndola con el resto de ingredientes. La fécula absorberá el exceso de sal.
Ahorrar energía: Guisar siempre con la olla y las cacerolas cerradas. Así el calor no se escapará, y cocinarás en menos tiempo. data-ad-format="auto" data-full-width-responsive="true">