el ?ltimo por hoy
Publicado: 01 Mar 2004 23:43
Un turista de mediana edad, en su primera visita a Amsterdam, visita la zona roja y entra en un gran burdel.
La matrona lo invita a tomar asiento y le env?a una muchacha joven para que lo entretenga. Se sientan, juguetean un ratito, se ríen un poquito; beben otro poquito, y ella se sienta en el regazo del turista.
él le dice algo al o?do y.. ella se sorprende, niega con la cabeza y sale corriendo!
Viendo esto, la matrona le env?a a una chica más experimentada para entretenerlo. Se sientan, juguetean un ratito, se ríen un poquito; beben otro poquito, y finalmente ella se sienta en el regazo del turista.
él le dice algo al o?do y ella dice "?NO!" y sale caminando rápidamente.
La matrona está sorprendida: ¿cómo es posible que este hombre del montón haya pedido algo tan extraño?, ¿cómo es posible que dos de sus chicas no quieran saber nada conél?
Decide que sólo lograr? algo la más experimentada: Lola. Lola nunca ha dicho que no, y no hay nada -pero nada!- que la sorprenda.
Entonces la env?a con el caballero de marras. Se sientan, juguetean un ratito, se ríen un poquito; beben otro poquito, y ella se sienta en el regazo del turista. El le dice algo al o?do y ella grita: "??DE NINGUNA MANERA!!", le pega un sonoro bofetazo, da media vuelta y se va.
La matrona está ahora absolutamente intrigada: jamás ha visto algo similar en todos sus años administrando burdeles.
Si bien hace mucho que no hace el trabajo está segura de que ha dicho "s?" a todas las cosas que un hombre puede pedir.. Debe averiguar qué ha pedido este hombre que ha hecho enojar a las chicas. Además, se da cuenta de que es una gran oportunidad para enseñarles a sus empleadas una lección de cómo se debe atender a los clientes.
Se acerca y le dice al hombre que ella es lo mejor de la casa y está disponible. Se sienta y conversan. Juguetean, ríen, beben y después ella se sienta en el regazo de él.
él, entonces, se inclina sobre ella y le susurra al o?do:
"...?Puedo pagar en pesos argentinos?"
La matrona lo invita a tomar asiento y le env?a una muchacha joven para que lo entretenga. Se sientan, juguetean un ratito, se ríen un poquito; beben otro poquito, y ella se sienta en el regazo del turista.
él le dice algo al o?do y.. ella se sorprende, niega con la cabeza y sale corriendo!
Viendo esto, la matrona le env?a a una chica más experimentada para entretenerlo. Se sientan, juguetean un ratito, se ríen un poquito; beben otro poquito, y finalmente ella se sienta en el regazo del turista.
él le dice algo al o?do y ella dice "?NO!" y sale caminando rápidamente.
La matrona está sorprendida: ¿cómo es posible que este hombre del montón haya pedido algo tan extraño?, ¿cómo es posible que dos de sus chicas no quieran saber nada conél?
Decide que sólo lograr? algo la más experimentada: Lola. Lola nunca ha dicho que no, y no hay nada -pero nada!- que la sorprenda.
Entonces la env?a con el caballero de marras. Se sientan, juguetean un ratito, se ríen un poquito; beben otro poquito, y ella se sienta en el regazo del turista. El le dice algo al o?do y ella grita: "??DE NINGUNA MANERA!!", le pega un sonoro bofetazo, da media vuelta y se va.
La matrona está ahora absolutamente intrigada: jamás ha visto algo similar en todos sus años administrando burdeles.
Si bien hace mucho que no hace el trabajo está segura de que ha dicho "s?" a todas las cosas que un hombre puede pedir.. Debe averiguar qué ha pedido este hombre que ha hecho enojar a las chicas. Además, se da cuenta de que es una gran oportunidad para enseñarles a sus empleadas una lección de cómo se debe atender a los clientes.
Se acerca y le dice al hombre que ella es lo mejor de la casa y está disponible. Se sienta y conversan. Juguetean, ríen, beben y después ella se sienta en el regazo de él.
él, entonces, se inclina sobre ella y le susurra al o?do:
"...?Puedo pagar en pesos argentinos?"