Si tienes bien controlada la temperatura de tu horno te quedará planito. Si te queda con montaña en el centro es que le tienes demasiada temperatura, y si se hunde es que es poca temperatura, es cuestión de buscar el punto exacto en tu horno.
Mucha gente utiliza el truco de cortar el pico y dar la vuelta, asi que vete dándote la colleja
También puedes hacer otra cosa que nunca falla, y es hacer planchas de bizcocho, a las que luego das la forma que quieras con una plantilla y poniendo una encima de otra ya tienes una tarta.
Y para que una tarta quede jugosa y el bizcocho no quede seco lo mejor es emborracharlo bien con un almíbar, si no la van a comer niños puedes echarle un poquito de licor que le dará un toque buenísimo. Para que el bizcocho quede esponjoso bate primero las yemas de huevo con el azúcar y las claras a parte a punto de nieve. Las incorporas al final después de la harina con movimientos envolventes y con una espátula para no bajar mucho la mezcla. Cuanto más fuertes esten batidas las claras y mejor se incorporen más esponjoso quedará el bizcocho.
