Necesitamos extender nuestro corazón para esos que están en necesidad.
Por eso pido a todas esas madres y mujeres de buen corazón, porque yo se que todas lo somos! y podemos proveer de unos días de felicidad a estos pobres.
Necesitan un buen hogar porque son huérfanos. Estoy dispuesta a tenerlos un par de noches en mi casa ya que esto es lo más correcto y mi familia va a tener que entenderlo!
Creo que es mi obligación como buena samaritana de proveerles de todas sus necesidades diarias para que tengamos una vida feliz.
A final de cuentas nuestras vidas se enriquecerán especialmente la mía y las suyas.
Por favor mirar las fotografías y suavizar vuestro corazón con estos gemelitos huérfanos.


