Hace unos días tenía que llevar un plato a un cumpleaños, y ya se sabe, todo el mundo lleva la clásica tortilla de patatas o la carne con tomate, pues yo hice éste pastel y el experimento me encantó...ya puedo comerme mi plato preferido sin estar en casa, llevármelo a una excursión y además presentarlo de manera muy diferente...
INGREDIENTES
1 kg. de patatas nuevas
250 gr. de guisantes (en grano)
6 huevos
50 ml. de nata líquida
aceite de oliva
sal
Para la base
Masa quebrada con thermomix
300 gr. de harina
125 gr. de mantequilla
70 gr. de agua
1 cucharadita de sal y otra de azúcar
ELABORACION
Hacer la masa quebrada poniendo todos los ingredientes por el orden que se indica en la receta, y programar 15 seg. a vel. 6. Metemos en el frigorífico una 1/2 hora, mientras hacemos las patatas confitadas.
De forma manual, pondremos en una superficie de trabajo la harina, formando un volcan, los trozos de mantequilla fría alrededor de la harina, y el agua dentro, amasamos hasta obtener una bola homogénea.
Precalentar el horno a 180º
Pelar las patatas y cortar en trocitos pequeños.
Poner abundante aceite en una sartén honda, aprox. 1/2 litro (éste aceite es reutilizable), echar las patatas con una cucharada de sal y confitar a fuego medio-bajo, cuando pasen 5 min. aproximadamente, agregamos los guisantes y dejamos confitar todo junto hasta que estén las patatas blanditas.
Ponemos un escurridor con un bol debajo y echamos las patatas para escurrirles el exceso de aceite.
Extender la masa quebrada y le damos forma redonda, tapamos un molde desmontable bajo y pegamos bien a los lados, quitamos los sobrantes y pinchamos con un tenedor la base de masa, tapamos con un papel de cocina (ponemos encima un puñado de legumbres) y horneamos a ciegas* unos 10 minutos.
Batir los seis huevos en un bol amplio, les ponemos sal y volcamos aquí las patatas con guisantes escurridas, ponemos la nata, mezclamos bien y volcamos la mezcla dentro del molde que hemos horneado.
Meter el molde de nuevo en el horno y horneamos a 180º durante 30 min.
* Este pastel que es parecido a una quiché, solo que no lleva nada de queso (aunque se le podría poner) está más rico templado y recién hecho, pero se puede consumir perfectamente frío.
* Hornear a ciegas, quiere decir hornear vacío, pero para que no se infle en fondo y pierda la forma, pinchamos con un tenedor todo el fóndo y horneamos con un papel de cocina y peso encima, que yo hago normalmente poniendo garbanzos que tengo especialmente para ello (los pobres están más quemaos que la pipa de un indio, jejeje)
Aquí os dejo una foto de la planta, es tan alta como una persona y como véis tiene un montón de guisantes colgados, esos me los comí yo, jejeje


