A veces ,tengo que escuchar que me dicen mis amigas o algunas personas, que para preparar "esos platos que tu haces", se necesita tiempo, lo típico..."aiss, es que yo no tengo tiempo..."
Me fastidia , ( con j) , porque preparar una cena tan sencilla no requiere más tiempo que preparar unos huevos fritos con patatas, y nada que envidiar a estos tomates tan ricos.
No és cuestión de tiempo, ni siquiera de bolsillo, tan sólo de ilusión por las cosas.
Los ingredientes son humildes:
- dos tomates hermosos
- una loncha de pan, ( usaremos la miga)
- unos pepinillos
- aceitunas negras sin hueso
- vinagre , aceite , sal
- queso rallado, parmesano.
Y para la cama de estos tomates:
- unos espárragos trigueros
- una cebolla
Partimos los dos tomates por la mitad y los vaciamos con cuidado.
Pondremos la miga de pan en un recipiente y añadiremos la pulpa del tomate , escurrida , un chorrito de vinagre, una pizca de sal , y tres chorritos de aceite de oliva.
Trituramos todo bien, y le añadimos el queso parmesano rallado, las aceitunas negras picaditas, y los pepinillos picados.
Mezclamos bien y rellenamos los tomates.
Los ponemos a horno fuerte (200º) un cuarto de hora o veinte minutos, dependiendo del tamaño de los tomates.
Mientras los tomates están el en horno, calentamos la sartén con un poco de aceite de oliva y hacemos a la plancha la cebolla y los espárragos.
Y lo servimos con mimo, cuidando un poco los detalles, que cuesta lo mismo hacer las cosas bien, que hacerlas mal, ¿o no ?.
