Pues ahí va todo lo que yo he visto, a ver sí os gusta a vosotros:
este es el mercadillo que ponen alrededor de la catedral de Freiburg (Alemania)
este es un vendedor muy chulo
y este un puesto que por aquí no hay
esto es el supermercado de un barco danés
y esto la sección de cacharritos de unos grandes almacenes suecos
aquí otros almacenes de otra ciudad
vendían la KitchenAido por 600 euros, a mí en internet me costó 360 euros, las tenían de todos los colores
y aquí una foto de un Lidl de una ciudad sueca, es igualito al que está en mi barrio
aquí un mercadillo de una pequeña ciudad, en el cielo un globo y en la iglesia se estaba celebrando un funeral, la vida sigue...
y aquí el mercadillo estilo "Rastro" o "Encantes", pero de una ciudad Sueca
Una señora sueca llamada Amalia Eriksson de la ciudad sueca de Granna, en el siglo XIX, inventó las piruletas, hoy en día esta ciudad es famosa por los caramelos, y toda la ciudad está llena de estas tiendas (este es mi pequeño homenaje a esta señora)
¿Quereís ver la cocina de una residencia de estudiantes de una pequeña ciudad de Suecia?, la comparten entre seis chicos.
esto es la secadora de la residencia
y esto es un aparato para planchar ropa
esta es la cocina de un submarino sueco
y esta la de un barco idem
y esta es la cocina de una casa típica de Suecia, una casa muy antigua en medio del campo, es de madera y estaba pintada de amarillo, la casa era preciosa, aquí un detalle de la ventana, se ve el bosque que rodeaba a la casa
la dueña de la casa una señora sueca muy amable me enseñó a hacer los típicos bollos de Suecia Kanelbulle (bollos de canela)
hizo la masa, la dejó fermentar y después la extiendió, la untó de mantequilla y la espolvoreó de azúcar, luego una mitad la espolvoreó canela y la otra de azúcar vainillado, después enrrolló la masa
y después la corto en trozos y puso cada trozo en una papel de magdalenas, los tapó con un trapo y los dejó fermentar una medio hora, y luego los metió en el horno
aquí os presento a mi socia, esperando pacientemente a que yo saliese del "museo de la cerilla"al que a ella no le habían dejado entrar
así trabajaban los niños suecos en el siglo XIX haciendo cerillas
a los suecos les gusta mucho vestirse con trajes de época, aquí en medio de una feria en la ciudad de Goteborg unas señoras hacian una especie de tortas que luego se cubrian con mermelada y vendian como por 1 euro
en las pastelerias vendian los enrollados de Atina, pero no estaban tan buenos como los de Atina.
Y cuando estaba en lo mejor, en la pantalla de la máquina de fotos salió un letrerito diciendo que no me dejaba hacer más fotos,
...espero que os haya gustado el reportaje
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