Campa, la habitación espero terminarla la semana que viene, si no se me sigue amontonando el trabajo.
Hoy me ha traído mi hija toda la ropa del cole del niño, para meterle los bajos y arreglarles la cintura.
Mi madre me enseñó a hacer muchas cosas, y como siempre ando liada, prometí que a mis hijas no les enseñaría nada para que no trabajaran, y claro, como no saben, pues me lo traen a mí. Me ha salido el tiro por la culata.
He visto una habitación preciosa, y me he enamorado de la mesa. No sé si seré capaz de hacerla, pero ando cavilando.
