Hoy pongo mi vela por Ramón, el amigo de Quela, por su mujer e hijos, y también por Quela y su marido, para que Dios les de las fuerzas suficientes para llevar esto lo mejor que puedan.
También por la nena, hija de los amigos de Cieloazul, para que Dios haga el milagro, y si no, que de fuerza a esos padres ante una situación tan espantosa.
