


Te leo y me acuerdo cuando yo tuve "algo" que no sé si era gastroenteritis, un virus raro o qué. El caso es que tenía hambre, pero era comer dos bocados y se me liaba un dolor de estómago impresionante y luego ni te cuento la digestión que tenía, me dolía la barriga un montón. Llegó un momento en que vi la comida como una tortura y aunque tenía hambre casi prefería no comer. Me tiré bastantes días que apenas desayunaba un par de bocados de pan tostado, comía un poco de arroz cocido y merendaba un plátano y la cena un yogur. Fíjate que comía poco y estaba echa polvo todo el rato hasta que terminaba de digerirlo.
Afortunadamente igual que vino se fue y luego volví a comer normalmente.




