Aquiles era un ser perfecto, un galgo alto, esbelto, guapo, joven y musculoso, un portento de su raza, que segun su "dueño" era "bueno para criar, cazar y correr". Era el mas veloz de todos, nada podía con el, libró muchas batallas en terrenos manchegos, en campos donde como siempre, esas galgueros de la España profunda usan todavía a estos atléticos galgos como armas para su batalla.
Aquiles era perfecto... hasta que fue derrotado en una de sus guerras, una simple ramita dió en su punto débil: su talón, quedando cojo de un pie de atrás al romperse el tendón, y pasó de ser el mejor, a ser según palabras textuales de su "dueño": "un estorbo, un deshecho, uno al que tenia que quitar ya pues no le valía"... el pobre Aquiles pasó de ser todo a no ser nada solo por una simple rama, todas sus victorias y sus proezas que tanto alababan esos galgueros que dicen ser "amantisimos de los galgos", quedaron relegadas y su destino era morir de la peor manera y pasar al olvido total, sin que le importara ya a nadie.
Pero la vida le ha dado otra oportunidad, ya no puede competir mas, pero si andar, jugar, correr y sobre todo ser feliz, empezar a conocer una vida nueva y tranquila donde le aprecien por ser como es, un galgo alto, esbelto, guapo, joven y musculoso, pero sobre todo una compañia perfecta, un animal noble y fiel al que siempre tendrás a tu lado dispuesto a darte lo mejor, a pesar de su pequeño "defecto": su tendón de Aquiles.
No llega a los 2 años, es de tamaño grandote, es cariñoso y sociable con machos y hembras, se entrega castrado, con chip, contrato de adopcion y seguimiento, para adoptarle escribir a [email protected]
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