Esta chiquitina de unos dos mesecitos apareció de la nada en Lugones, ella solita, muy asustada, en una zona muy peligrosa. Al principio era un poco bufona y gruñona, pero la sociabilización de la peque duró un par de minutos, hasta que se vió a salvo, con comida rica y con muchos mimos.
Es muy chiquitina, pesa solo 600 gramos, estaba muy sucia y muy delgadita, pero se aprecia que va a ser todo un bellezón. No es vaquita, porque su manto no es blanco y negro, sino gris azulado y blanco. Le encanta que le rasque la barriga y también le encanta jugar a "asesinar" ratoncitos de peluche.
Contacto:
[email protected]
data-ad-format="auto"
data-full-width-responsive="true">