Bueno veo que estuvísteis hablando de partos ....Transil lo de andar a gatas no sé, a mí la matrona me dijo que me pusiera en posición de rezo musulmán, porque efectivamente Candela estaba de culo. Desde las 28 semanas estuvo de nalgas pero como era pronto me dijero que se daría la vuelta, a las 32 semanas seguía de nalgas así que eco a las 4 semanas que si no se daba la vuelta habría que programar cesárea.Un mes de espera poniéndome en la postura en cuestión llega el día de la eco y nada seguía de culete así que llamada al hospital para ver la fecha y una semanita después nacería Candela. Ese día llego a casa de mis padres y me dice mi hermano que el médico dietista y acupuntor al que estaba iendo y al que yo fuí hace unos años le preguntó por mí le dijo que estaba embarazada y que estaba la niña de nalgas y le dijo que hiciera una cosa que probablemente me llevaría una sorpresa. En el dedo meñique de los pies hay un punto que se estimula para provoca que los bebés que están de nalgas se den la vuelta y por lo visto es muy efectivo, lo que pasa que yo ya tenía poco tiempo, pero si tu hermana puede que vaya a un acupuntor y se informe y el yoga también parece que funciona.
Pues bueno depués de todo el rollo mi "parto", ingresé un Lunes por la tarde y hasta el miércoles no me hacían la cesárea, no tenía contracciones, o por lo menos que yo notara, por lo que parecía que estaba en un hotel. El Miércoles por la mañana cuando me llevaron el camisón me dijeron que me harían una última eco por si había cambiado de postura, pero nó, si ya llevaba así dos meses no iba a cambiar ya de postura. Así que sobre las 11 y algo me dijeron que después de la cesárea de urgencia que estaban haciendo me tocaba a mí. A las 12 menos algo viniero a ponerme la ponerme la sonda y acto seguido al quírófano, despedida de todos, mis padres, mis hermanos, mi mejor amiga y del membri que se tuvo que quedar en la puerta

.Entré alas 12 y a las 12 y 20 ya estaban el membri y mi amiga escuchando llorar a la niña. Cuando empezaron la ginecóloga me preguntó si quería ver a la niña cuando la sacaran y le dije que sí, así que cuando estaba todavía con el cordón me quitaron la abana de delante y me enseñaron a mi niña, cortaron y se la llevaron para arreglarla. A la mijilla la escuche llorar y poco después me la trajeron y me la acercaron a la cara porque todavía estaba con el tensiómetro y el suero con la medicación puesta,lo malo que no podía tocarla.Luego a que se me despertaran las piernas y después de una horita y algo a la habitación, y un rato después me llevaron a mi niña y ya la pude coger en brazos y tenerla ahí dormidita toda la tarde.
Sin duda lo mejor de mi vida
Bueno se acabó el tostón