maría guapa te entiendo perfectamente, hacer algo con tanto esmero y tantas ganas y que luego se chafe en un momento. Pero bueno, piensa que la próxima te sabrá a gloria.
A mi chico le pasó lo mismo, vinimos de vacaciones hace un par de años, era domingo por la noche y sacamos del congelador un paquete de gulas, las hicimos y él puso la mesa, llevó mi plato y luego llevó el suyo, siempre comemos en el salón y al entrar en el salón se tropezó con la alfombra y todas sus gulas acabaron esparcidas por la alfombra, y lo peor ¡¡¡el aceite!!!, yo estaba en la cocina todavía, no le oí, cuando fui al salón le veo comiendo las gulas de la alfombra!!! y sacándose pelos y pelusas de la boca!!! ahora me descoj.ono pero en ese momento me dio pena, le di mi plato y me hice un colacao con galletas.
Veo que por lo menos no te has quedado sin comer, te has hecho otro plato, aunque no sea lo mismo, pero lo dicho, otro día te parecerá el plato de pasta más rico que hayas comido nunca
