Mensaje
por JosefinaGonz?lez » 19 Sep 2005 22:26
No lo he escrito para justificarme, ni para animarme, lo he escrito para aquellos que piensan que un ama de casa es menos que una mujer que trabaja. Os diré que los mayores desprecios por serlo, los he recibido de mujeres que tabajan y que psan de la casa y el mayor elogio de un hombre (un minıstro griego) .
Mi suegro nunca valoro a las amas de casa y de casta le viene al galgo.
Aunque mi marido durante todo nuestro matrimonio una de sus canciones favoritas era "Chefa trabaja" , nunca lo crei necesario, primero porque aunque al principıo el sueldo de mi marido no era deslumbrante, mis padres nos vestian y pagaban siempre las vacaciones y asi yo me podia ocupar de mis hijos sin que lo tuviera que hacer una tata c**o fuí en mi caso y mas tarde porque mi marido ganaba lo suficiente c**o para que yo no tuviera que hacerlo y no soy avariciosa y ademas me encontraba agusto y con tiempo para llevar a cabo mis aficiones.
En España cuando una mujer trabaja se deja la comida hecha o los niños comen en el cole o tienen una abuela o tia que les ayude. Yo ni tenia cole con comida ni familia alrededor.
En Alemania los ninos llamados "niños de la llave" llegan a una casa solitaria y con 6 añitos ya o se preparan algo en el micro (comida preparada del super) o se van a un restaurante (tipo MC Donal) con el dinero que les han dado (este era el caso de İvan amigo de mi hijo mayor) o solo encuentran en la casa unas patatas chips para comer a medio dia (caso Tomas, amigo de mi hijo pequeño) .
Os diré que algunos compa?eros de mis hijos se burlaban porque con 6 años yo les llevaba al colegio y los recogia
Mis hijos siempre me han agradecido que llegaran a la hora que llegaran y con quien llegaran yo tenia la comida ya preparada y que si se les olvidaba un cuaderno con los deberes, despues de una llamada de telefono, estuviera en la puerta del cole para llevarselo.
En Alemania no hay colegio por las tardes y estos mismos niños o vaguean por el centro de la ciudad o tienen un programa tan apretado de actividades organizadas por los padres, que no pueden ni disfrutar de ser niños.
Dej? mi trabajo, mi familia y mis amigos para irme a un pais desconocido no solo en el lenguaje y no me arrepiento, tampoco me arrepiento mirando a mis hijos de no haber trabajado, de lo que me arrepiento es de no haberlo hecho con el hombre adecuado o por lo menos uno que no lo haya apreciado