Yo fum? durante 20 años. Tratú de dejarlo por tres veces y siempre volvía funar cuando me encontraba estresada, procupada o en una fiesta, porque todos fumaban y me provocaba demasiado.
Lo dejé cuando de verdad me lo propuse, sin ayuda de medicamentos o dietas. Sólo tomó la decisi?n y me program?:
Cada vez que deseaba fumar, me decía: "Quiero pulmones limpios. Mi voluntad es más fuerte que nada!"
Cuando sentía ese deseo imperioso de buscar un cigarrillo, simpemente me decía (hasta en voz alta) "Tengo ganas, pero no me da la gana. Quiero pulmones limpios!"
Así fue c**o lo dejé. Ya de eso hace 7 años.
Ahora el olor del cigarrillo me molesta tanto que me aparto de quienes están fumando, de manera incosciente

S? se puede abandonar este h?bito. Sólo se necesita fuerza de voluntad!