Estaba embarazada de 39 semanas y en una de las visitas a la gine, me salión un poco la tensi?n alta, y c**o debe de ser bastante chingui, me dijo que nos fu?semos a Zaragoza al Clúnico (soy de un pueblo), para ver que es lo que pensaban all?.
Llegamos al Clúnico a las 22 horas, y me dijeron que puesto que estaba de 39 semanas, me dejaban ingresada, y que al día siguente me lo inducir?an.
Al día siguiente la frase mígica era: "madre que verde que estés....", por lo que me pusieron una especie de tampax, para iniciar todo el proceso, puesto que no tenía el cuello borrado para nada. Estuve todo el día borrando el dichoso cuello, con dolores, pero bueno... llevaderos. A eso de las 20 horas (llevaba desde las 11 con el tampax ese), yo ya tenía dolores basntante fuertes (aunque para nada en comparaci?n con lo que me esperaba), y me dijeron que tenía 1 cm dilatado. Yo ya no podía con el dolor, y les decía: "y la epidural, qué?" y me contestaban: "uy, anda que no te queda para la epidural...." y yo que ya no podía con mi alma. Yo solo lloraba. Yo no tenía contacciones, yo solo tenía una única contracci?n, puesto que eso no disminuña, era un dolor horrible, sin descanso. Yo me volvía a quejar llorando, y me decían las asquerosas de ellas: "pues te quedan todavía unas 10 horas, así que te tienes que aguantar", y yo solo lloraba, no podía más, de verdad era horrible.
Alas 23 horas, yo ya ni era persona ni era nada, viene una matrona y me dice: "hija, que poco aguantas el dolor, eh?" te voy a mirar pero no creo que estés más de 3 cm dilatada", y me mira, y me dice, "ay, si ya estés de 10, y la bolsa la tienes ahí mismo, ay que ir al paritorio pero ya". Buejno pues imaginaos la escena, mi pobre marido, empujando la cama, conmigo encima hasta el paritorio, puesto que fue tan inesperado para ellas, que ni celador ni nada. La matrona corriendo hasta el paritorio para que abrieran las puertas, porque si no yo paréa en el pasillo, mi marido que casi no le daba tiempo de ponerse los pantuflos y la bata verde, yo seguía llorando.... y tras tres empujones nació mi nenita.
Yo seguía diciendo entre lloros: "ayyyy que ya no puedo más!!" y me decían "tranquila, que ya se ha pasado todo" y yo insistía: "ayyyy que seguro que no...." pero si la verdad que se pasó todo, ? mejor dicho, a partir de ese momento comenz? todo, comenz? la vida para mi nena y comenz? una nueva vida para nosotros, en la que el centro de todo es Paula, y que no cambiaráa por nada, pese a los dolores del parto y pese a todo. la verdad es que hasta que no te toca, no sabes lo que puedes llegar a querer a un hijo/a, verdad???
Ala, ya está contado.
Muchosss
