Es posible que muchos alimentos inusuales tuvieron su origen debido al hambre extrema y a la necesidad (el que descubri? que las ancas de rana eran comestibles, seguramente tuvo que tener mucha hambre), sin embargo, estas costumbres alimenticias perduraron incluso cuando la comida resulto abundante. Las personas de Skuon en Camboya descubrieron que las tar?ntulas tienen un sabor parecido al del cangrejo en una época de escasez y actualmente siguen comiendolas.
Los abor?genes australianos disfrutan de las larvas de mariposa y dicen que cuando se consumen vivas tienen un sabor parecido al de la nuez. En la sabana africana se ingieren enormes orugas verde azuladas (de la polilla Emperador) por ser una excelente fuente de proteínas y minerales. En el este de Asia se acostumbra comer gusanos de bamb? fritos. En Corea se comen los gusanos de seda y en M?xico, el gusano de maguey y los chinicuiles, ademas de insectos vivos llamados jumiles. En China se asegura que los apicultures que consumen larvas de abeja gozan de una gran virilidad. En Colombia, las hormigas gigantes saben mejor asadas. Para comer hormigas verdes australianas es necesario arrancarles la cabeza, ésto evitar? que muerdan cuando se mastica su jugoso abdomen.
Si prefieres un menu que incluya suculentas y crujientes patitas, la mejor opción esta al noreste de Tailandia, donde es com?n alimentarse de insectos que comen arroz, miden 10 centímetros y parecen cucarachas gigantes. Para comerlos, es indispensable arrancarles la cabeza y chupar el arroz masticado de sus entra?as. Generalmente se sirven c**o tapa para acompañar la cerveza.
Curiosamente, hay personas que encuentran repulsivo el consumo de grillos, pero adoran los camarones, siendo su apariencia y sabor muy parecidos. El asunto es que cierta comida nos parece ins?lita cuando no estamos acostumbrados a comerla. Haz la prueba y tal vez te guste, podrías descubrir un nuevo mundo culinario. ?te atreves?
