"CUENTA la voz popular que la leyenda de Sant Jordi, el Drag?n y la Princesa en Catalunya ocurrió en la villa de Montblanc hace mucho tiempo. El drag?n era el más poderoso de los dragones puesto que podía moverse por el cielo, por la tierra y por el agua. Y la Princesa era la de más linaje de todas ya que era la misma hija del Rey. El terror que el drag?n imponía era terrible. Cada día devorava un par de corderos. Quando le dieron bueyes y caballos tampoco tuvo suficiente. Y así fue hasta que tuvieron que sortear personas para apaciguar el hambre de la Bestia. Y el Rey que era el de más linaje, catal?n, y que viv?a en la villa, quiso poner a su fam?lia en el sorteo. Y de la olla salió el nombre de la princesa. El Rey aceptú el destino y no quiso cambiar el sacrificio por el de ningún otro vecino de los que se ofrecian. Vestida de blanco, la Princesa fue al sacrificio. Y surgi? un joven caballero, armado de cabeza a los pies, cabalgando un porcel blanco para liberarla. Era bello c**o el sol, era forastero y se llamaba Jordi. Y embesti? con f?ria al drag?n que venia a ellos por la Princesa. Lo dejé medio muerto, confundido y acabado. Entonces, él atú el drag?n con el cord?n de la cintura de ella, y el drag?n, herido y manso, lo seguía c**o una oveja. Después, con un golpe de lanza rematú el drag?n, que al morir se fundi? en el suelo, y de donde el drag?n se fundi?, nació un rosal de rosas rojas c**o la sangre. Sant Jordi cogi? la más hermosa y la ofreci? a la Princesa. Montú a caballo, y entre gritos de gozo y alegria atraves? la muralla por la puerta que, en su recuerdo de esta gesta, hoy en día es conocida aún c**o el "Portal de Sant Jordi". Y todo esto ocurrió delante de los ojos del Rey y los vecinos de Montblanc, que contemplaban aterrorizados el combate. Y fue por esto que escogieron Sant Jordi c**o patr?n de la Villa hace muchos años, hasta que tiempo adelante se olvidaron."
