Está hecho con la harina de semillas del Lidl, y he seguido más o menos las instrucciones que vienen en el paquete, dejandole eso sí mucho más tiempo de reposo, y me ha salido una autúntica delicia: la corteza crujiente, crujiente, y la miga densa, jugosa y humeante...


Para acompañar el pan, este platito de espinacas con garbanzos en salsa de tomate y especias.

