A media mañana, puedes tomar: (a elegir)luna41 escribió:lucinut, una duda que tengo, que no se si estoy haciendo bien. En los desayunos yo me tomo nada mas levantarme los 2 vasos de agua y un cafe con leche. A media mañana una puntita de pan con jamón, o queso o pavo, y ya está. ¿aparte se puede tomar también dos tostadas con mermelada de ciruela, y un zumo. Es que yo entiendo que tienes que elegir entre el bocadillito o las tostadas y el zumo, pero no se si lo he entendido bien. Aclaramelo. no sea que este comiendo de menos ja ja ja.gracias guapa
el bocadillo de jamón salado o queso o pavo, un zumo (o café con leche)
2 tostadas con un poco de mantequilla y un poco de mermelada de ciruela.
Yo lo que entiendo es que tienes dos opciones:
Primera:
Tomar el bocadillo de jamón serrano (que puede ser otro día de queso o de pavo) con un zumo de fruta (naranja, piña, tomate, ...)
Segunda:
Dos tostadas con mermelada (mejor si presecindes de la mantequilla y nunca margarina)
Así que si te quedas con hambre puedes tomar además del bocata un zumo de lo que más te guste

Neka escribió:Me apuntode cara a la operacion bikini me tengo que quitar unos cuantos kilitos que he ganao en el invierno.
Bienvenidas a las dossarcha escribió:yo quiero empezar la dieta y me gustaria saber como lo hago si no suelo cenar porque me sienta mal y suelo comerme un yogurt y una fruta decidme si lo puedo hacer asi.gracias

La costumbre de cenar sólo fruta es relativamente común en muchas personas preocupadas por su figura, por sus kilos de más y por su salud. Ocurre sobre todo en mujeres de todas las edades. Acostumbran a reservar el momento de la cena para las tres raciones de frutas diarias recomendadas, e incluso alguna más si llegan a casa con hambre. Entienden que son alimentos que sacian y llenan. Al mismo tiempo, creen que hacen de la cena un menú ligero en calorías.
Cena con sorpresa inesperada
La sorpresa se la llevan cuando, después de una o dos semanas de seguir con el plan de cenas frugales (sólo fruta), comprueban que no han adelgazado o, si lo han hecho, no han perdido los kilos deseados.
En muchos casos, si no se pierde peso es porque a la persona no le sobra grasa, de manera que el organismo no pone en marcha los mecanismos necesarios para desprenderse de ella. Suele suceder que los molestos «kilos de más» por los que se hace el cambio en las cenas responden a la falta de tono muscular por falta de ejercicio (queda marcada la «barriguita» y resulta incómoda la flacidez de los brazos).
Cenar sólo fruta es una idea relativamente extendida entre mucha gente, pero equivocada si se quiere perder peso. De todas maneras, sí que puede ser efectiva de forma temporal si lo que se persigue es aligerar el cuerpo cuando se sufre retención de líquidos.
Poder diurético, no adelgazante
La concentración de las tres raciones diarias de fruta en la cena desplaza del menú otros alimentos necesarios en la dieta
Las frutas son un grupo de alimentos con una composición nutritiva muy específica. Son abundantes en agua y fibra, fuente indiscutible de vitaminas (vitamina C, ácido fólico, betacaroteno o provitamina A), y de minerales como el potasio y el magnesio. Completan su valor nutritivo los pigmentos, que en las frutas cumplen un doble propósito. Primero su poder colorante, lo que da tono a la piel o a la carne de las frutas (betacaroteno de naranjas, mandarinas y melocotones; licopeno de las fresas; y antocianinas de las uvas y las ciruelas). En segundo lugar, su poder antioxidante, por lo que resultan complementos indiscutibles en una dieta preventiva.
La combinación de todos estos nutrientes en las frutas explica la propiedad esencial de los vegetales para depurar el organismo. Por ello, su consumo habitual se manifiesta en una mejoría física y mental. Se siente la cabeza más despejada y el cuerpo, en particular las piernas, más ligeras y menos pesadas. Se fortalecen las arterias y las venas, con la consiguiente mejora de la circulación sanguínea. Se nota que se orina mucho más, por lo que se eliminan más sustancias de desecho, pero no grasa. Así, quien come fruta siente más ligereza, algo que no necesariamente se ve reflejado en el peso (si la razón del exceso de peso no es la retención de líquidos).
Espero te sirva de ayuda, a la noche os damos número
