Mensaje
por profiterol » Mar 02 Feb 2010 22:17
Net, yo, hace siglos, preparé una vez ossobuco siguiendo una receta que encontré por internet. No recuerdo de dónde la saqué, por lo que no puedo citar la fuente...y bien que lo lamento porque hay que dar el mérito a quien se lo merece.
La tengo anotada en una libreta. Lleva
4 cañas de ternera (ossobuco), 100 gr. de zanahoria, 100 gr. de cebolla, 1 tallo de apio, 4 dientes de ajo, 8 tomates pelados y sin pepitas, 1 vaso de vino blanco, 1 litro de caldo o agua, aceite, mantequilla, harina sazonada con sal, pimienta y 2 cucharadas de perejil picado.
Se prepara a poder ser en una cazuela de barro, la verdad es que las cazuelas de barro siempre le dan un punto especial a los guisos de carne. Se pone a fundir un fondo de mantequilla y ahí se saltean la cebolla, el apio y la zanahoria cortados en brunoise, durante tres o cuatro minutos, fuego medio, para que no se achicharren. Se añade ajo picadito, se remueve y después se ponen los tomates, al natural pero sin piel ni las pepitas (yo usé de lata, eso sí lo tengo claro). Se saltea un poquito todo el conjunto anterior y se riega con el vaso de vino. En unos cinco minutos a fuego medio, el alcohol se evapora. Se añade el caldo (yo usé caldo de carne) y después el ossobuco propiamente dicho, es decir, los trozos de ternera, que, previamente, hay que rehogar un poquito en aceite en una sartén, hasta que cojan algo de color.
Cuando el interior de la cazuela rompa a hervir, se rectifica de sal. Después se saca la carne, que ya ha sido rehogada en sartén y ha tenido un hervor en cazuela, para meterla al horno precalentado, a unos 180 grados. Ahí toca ser paciente, porque necesita más de una hora de horno. En torno a una hora y cinco/diez minutejos extra.
Cuando la carne esté lista, todo lo que se había dejado enfriando en la cazuela de barro (el acompañamiento...) se calienta hasta ebullión, se desgrasa un poco con una espumadera, se deja reducir y se añade perejil picado. Esa especie de salsa cubre luego el ossobuco.
Para mí es una receta muy trabajosa. La hice porque quería darle una sorpresa a mi maridín, que estaba acostumbrado a que le despachase con precocinados; como él en los restaurantes italianos pide a menudo ossobuco, pensé que le haría ilusión. Casi acabé hartita de estar en la cocina. Y no me pidas que te puntúe esa receta porque me da miedo ;)