Para evadirme de todo me he metido en la cocina para hacer una tarta a mi sobrino que ha tenido cumpleaños y no le hice nada ese dia. Os podeis imaginar que con estos ánimos creo que mejor hubiera sido que hubiera salido a tomar algo con una amiga o haberme ido a la disco, pero no meterme en la cocina.
Entro en la cocina, algo mas animada después de hablar un ratito con Rosario Elche, cojo la receta, esta no es muy apropiada para la bandeja que tengo aquí, pero quiero probar, igual hay suerte y sale como en Frankfurt. Al ser mas pequeña la bandeja el bizcocho me ha salido un poco grueso.
Segundo, cuando he querido mezclar la gelatina ya disuelta, he pensado ¿ con las yemas? ¿seguro? si, eran con las yemas, pero después que estas hubieran sido mezcladas con el zumo, el cual he olvidado por completo hasta que tenía las yemas mezcladas con la gelatina y con la nata y ...lo he visto, allí estaba el zumo en un rinconcito de la encimera, casi detrás de la tele, que en lugar de estar en sus jarritas de cristal tan monas, estaba en la jarra donde yo había juntado los tres, dos de naranja y uno de limón, para la foto del paso a paso, en una jarra de plástico toda fea ella.
Lo he incorporado,




Después me he puesto a montar la tarta ¿donde está el molde desmontable de 24 cm? y donde el de 26? bueno, voy a usar el aro universal, ¿tampoco? ¿donde están mis cosas? ah! dos de ellos en casa de una hermana y el otro en casa de la otra junto con una fuente de la última lasagna que llevé a mi sobrina y su novio y con un tupper de un tiramisú.
Echo mano del molde de 22 , menos mal, con lo grueso que ha salido el bizcocho no hubiera tenido bstantes tiras para los otros, pero la crema y la crema


La cocina la tengo, como nunca en mi vida, parece que ha pasado un huracán
Dentro de un rato os diré. Estoy intrigada como se verá por dentro depués de rellenar la crema por arriba. Eso sí, si se tiene en pié, no me entretendré en la decoración, que seguro que la c ...go y la tarta me la como yo, que para eso me ha costado tanto trabajo.
¿sabeis por qé? porque con tanto jaleo me he olvidado de comer.