. Como esta haciendo un tiempo totalmente primaveral me apetecía tomar alguna tarta más fresquita 
después del invierno tan crudo que hemos tenido y pensado y hecho. La receta la he sacado del libro de th. Repostería y pastelería y lo que más me ha gustado de todo ha sido la crema es muy parecida al lemon curd, esta crema tiene un sabor a limón no demasiado intenso pero muy agradable y combina perfectamente con las fruta elegidas. Ha sido un éxito total, no quedaron ni las miguitas. 
INGREDIENTES:
Base:
1 plancha de hojaldre refrigerado
Crema de relleno:
150 gr. de azúcar
la piel de un limón (solo la parte amarilla)
200 gr. de nata líquida
200 gr. de queso tipo Philadelphia
1 cucharada de maicena
4 huevos
50 gr. de mantequilla
Decoración:
5 o 6 fresones
3 kiwis
1 plátano
Glaseado:
100 gr. de azúcar
100 gr. de agua
2 cucharaditas de zumo de limón
ELABORACION:
Base: precalentamos el horno a 180º. Estiramos la plancha de hojaldre en la bandeja del horno, cortamos tiras de 3 o 4 centímetros de ancho y lo colocamos en los bordes de la masa, pinchamos la base de la tarta con un tenedor(solo la base, no los bordes) y lo pincelamos con huevo (yo no lo he hecho) introducimos en el horno hasta que los bordes suban y empiece a dorarse.
Relleno: ponemos en el vaso de la Th muy seco el azúcar y programamos 30 segundos, velocidad progresiva 5-10. Añada la piel de limón bien seca y programe 1 minuto velocidad 5-10. Añadimos al vaso todos los ingredientes restantes del relleno y programamos 7 minutos 100º velocidad 4 (si los ingredientes están fríos de la nevera añadimos dos minutos más). Dejamos enfriar y volcamos sobre el hojaldre una vez fríos la crema y el hojaldre.
Glaseado: enjuague bien el vaso y ponga los ingredientes del glaseado. Programamos 10 minutos, temperatura varoma, velocidad 2 (lo he hecho en un cacito en la vitro).
Montaje y decoración: mientras que se hace el glaseado pelamos las frutas y partimos en rodajitas finas y las vamos colocando sobre la crema de forma decorativa. (podemos utilizar otras frutas, las que más nos gusten). Pintamos la tarta con el glaseado, cubriendo bien las frutas y la dejamos en la nevera hasta el momento de servir. (la mía hizo unos cuantos kilómetros antes de servirla).
coloridad y buenísima, además con unas fotos preciosas que invitan a morder la pantalla 
