La sal conjuntamente con la desecación, impide el desarrollo de gérmenes patógenos y contribuye a la conservación de los alimentos.
El bacalao en salazón, se utiliza como vemos desde hace siglos y las recetas que se pueden hacer con él, son incontables....
Esta receta es tan sencilla como rica, tan económica como nutritiva y se pueden utilizar las partes más feas del bacalao, osea que puede ser una receta de aprovechamiento y reciclaje de las partes más finas del bacalao.
INGREDIENTES
Para dos raciones
2 trozos finos de bacalao desalado (150-200 gr.)
2 patatas gordas
1 cebolla tierna o cebolleta
1 ajo (opcional)
1 ramita de perejil picado
3 huevos
aceite de oliva
sal
ELABORACION
Limpiar el bacalao de pieles y espinas y desmigar en un bol
Pelar las patatas y picarlas en trocitos pequeños, cortar las cebollas en trocitos, pelar el ajo y cortarlo en trocitos muy pequeños.
Poner aceite en una sartén y freir las patatas junto con la cebolla y el ajo a fuego medio, removiendo de vez en cuando. Cuando las patatas empiecen a estár blanditas, añadir el bacalao desmigado, ponerles sal y probar para rectificar si es necesario, cuando el bacalao cambie su color a amarillo, le quitamos la mayor parte del aceite escurriendo las patatas, pero dejándo éstas en la sartén en que las estamos cocinando.
Abrimos los huevos y vamos echándolos a las patatas, moviendo el revuelto para que el huevo cuaje, sin importarnos romper las patatas al removerlo, espolvoreamos con perejil picado y servimos.
Este plato está muy rico recién hecho muy caliente....pero frío también es delicioso, así que podemos sacarle mucho partido....incluso para aperitivos, lo servimos encima de rodajas de pan con un poquito de mayonesa o alioli.....uhmmmm!!!!!
Espero que os guste!!!!!

