Esta es una de esas tartas que me dejó prendada , por su colorido, por sus ingredientes y una vez que la comí, no tengo duda, por su sabor...es exquisita y muy ligera...
No ha sido fácil encontrar frambuesas, pero al fin un día las ví y no dudé que iba a preparar con ellas, la crema ácida fué más fácil de encontrar y por cierto, desde que la probé la he utilizado también en cremas de verduras y es muy rica.
INGREDIENTES
Para el fondo de la tarta:
200 gr. de galletas de mantequilla
80 gr. de mantequilla derretida
Para el relleno:
5 hojas de gelatina
300 gr. de frambuesas
400 gr. de queso fresco
125 gr. de crema acidificada (se puede sustituir por yogur)
4 cucharadas de azúcar
el zumo y la cáscara de un limón
200 gr. de nata espesa
Para el glaseado:
1 sobre de gelatina roja
un poco de azúcar si la gelatina no contiene azúcar
100 gr. de frambuesas para decorar
ELABORACION
Colocar las galletas en una bolsa y reducir a migas con un rodillo o ponerlas en la picadora de la batidora o en la thermomix y triturarlas hasta que estén muy finas.
Fundir la mantequilla en el microondas y mezclar con las galletas, añadir si es necesario una cucharadita de leche.
Preparar un molde redondo desmontable y poner una capa fina de las galletas apretando bien con una cuchara para que quede compacta y lisa por todos los lados. Dejar en el frigorífico durante 30 min. para que se endurezca.
Remojar las 5 hojas de gelatina en agua fría.
Mezclar el queso fresco, la crema ácidificada, el azúcar, el zumo y la cáscara de limón, batir bien hasta que esté todo cremoso.
Tomar dos o tres cucharadas de la crema y ponerlas en un cacito al fuego, añadir la gelatina escurrida y remover hasta que se disuelva, añadir a la crema de queso restante y mezclar.
Montar la nata bien fría e incorporarla a la crema de queso con cuidado para que no se baje.
Tomar el molde del frigorífico y echar la mitad de la crema dentro, poner las frambuesas reservando algunas para la decoración y poner el resto de la crema. Dejar enfriar en el frigorífico unas dos horas hasta que cuaje bien.
Una vez dura, preparamos la gelatina de la cobertura siguiendo las instrucciones del fabricante y ponemos una fina capa sobre la crema. Dejamos cuajar unas dos horas.
Una vez cuajada y bien fría la tarta, pasamos un cuchillo muy fino para desmoldarla, quitamos el aro y arreglamos los bordes con un cuchillo o espátula mojados en agua caliente.
Adornamos con las frambuesas que tenemos reservadas y servimos bien fría.
* Podemos sustituir la gelatina de sobre roja por zumo de grosellas o frambuesa y gelatina neutra en hojas.
*Los bordes quedán mucho mejor si por dentro del aro, ponemos una lámina de acetato.
Espero que os guste!!!
