Esto me recuerda...
En un bar de Huelva, entra un hombre y le pide al camarero que le ponga una ración de gambas y un café con leche.
El camarero, se lo pone. Y extrañado con la combinación, se queda observando al hombre.
El cliente coje una gamba, la pela, la moja en el café y se la come.
Coje otra y lo mismo.
Y así hasta acabar con las gambas y el café.
Se le acerca el camarero y le dice:
--Perdoneme usté, jefe, pero es la primera vé que veo comer gambas con café.
--Y la última, dice el hombre, porque esto está malísimo.
