Lo llamo empatatado para distinguirlo del pastel de carne empanado o del que es tipo fiambre. Y lo llamo Generación Ni-Ni porque ésta de ahora es la versión exprés para vaguetes: ni el puré de patata es casero, ni la salsa de tomate es natural... y para colmo la carne picada está comprada en paquete.
Pero que no cunda el pánico, que igualmente está tremendo de bueno. 
En cualquier caso, y lo llamemos como lo llamemos, este plato es un clásico. Todo el mundo lo conoce y lo sabe hacer, pero la gracia del asunto radica en que cada uno le da su propio toque personal, se lo lleva a su terreno. Yo a veces le doy un giro y a veces otro, sobre todo usando unas especias/verduras u otras, pero este último lo he hecho como sigue.
Ingredientes (para llenar una bandeja que hace unos 30 x 22 cms.)
Para el puré de patatas:
Un sobre de puré de patata de 4 raciones
1/4 litro de agua
1/8 litro de leche
1/2 cucharada de mantequilla
Una pizca de sal
Una pizca de pimienta
Una pizca de nuez moscada
Una pizca de hierbas provenzales (la mezcla que ya viene preparada)
Para el relleno:
Un paquete de carne picada estándar, de los que ya venden preparados en el súper
Entre 1/2 y 2/3 de un pote de tomate frito estándar, según la densidad que deseemos (cuanto más "casero", mejor)
Una zanahoria
Una cebolla
Un puerro
Un puñado de piñones
Dos dientes de ajo, según el tamaño
Un chorro de vino blanco
Una pizca de sal
Una pizca de pimienta
Una pizca de nuez moscada
Una pizca de hierbas provenzales (la mezcla que ya viene preparada)
Una pizca de perejil
Una pizca de menta (ésta natural y fresca de mi cosecha, oh yeah
)Aceite
Para el gratinado:
Mantequilla
Queso rallado
Preparación
Hacemos un puré de patatas denso, es decir, con la mitad del líquido que se indica en el envase (son las cantidades que pongo más arriba). Para ello, seguimos las instrucciones que vienen al dorso del propio estuche. También incorporamos los condimentos que detallo en la lista. Lo reservamos. Mientras preparamos el relleno, se va enfriando y lo podremos trabajar mejor.
Sofreímos como lo haríamos normalmente (o sea, ya troceados) los ajos, la cebolla, el puerro y la zanahoria. A continación incorporamos la carne picada y los piñones, y continuamos rehogando. Ponemos las especias y un chorro de vino blanco, y dejamos reducir unos minutos. Finalmente incorporamos el tomate de pote, mezclamos bien, y lo mantenemos en el fuego otro poco más.
Vertemos el relleno en la bandeja.
Por otro lado, cogemos el puré de patata denso y lo estiramos de manera que pueda cubrir por completo la superficie de la bandeja. Podéis estirarlo con un rodillo, improvisar uno con una botella o frasco alargado, o irlo chafando con algo plano tipo tenedor y paciencia, pero esto último ya sería mucho currele para un ni-ni.
El caso es extenderlo encima de una superficie donde no se pegue y que luego nos permita desplazarlo hasta la bandeja y cubrir el relleno como lo haría una sábana, pies y cabeza incluidos. Se aceptan chapuzas. No importa que se rompa o que no quede demasiado liso, porque luego lo podemos arreglar con un tenedor, y el gratinado acaba de apañar el resto.Cortamos unos cuantos daditos de mantequilla y los repartimos por encima del sobre de puré, o sea, ya colocado encima del relleno. Echamos mogollón de queso rallado por toda la superficie.
Metemos en el horno y gratinamos unos minutos hasta que esté doradito.
Saludos
