Realmente es una ciudad FASCINANTE. Hemos quedado gratamente impresionados. Y con ganas de volver a pasar unos días.
Fue delicioso (nunca mejor dicho) poder comer en el restaurante-mirador del Palacio de Topkapi. La mezquita azul es una maravilla. Y Santa Sofia, tiene exteriormente un aspecto estupendo. Por dentro está bastante deteriorada, pero la estaban restaurando.
El Gran Bazar, todo un para?so para las compras.
En definitiva, una ciudad que enamora




