Herminia, creo que lo han visto corriendo detr?s del camión de Pascual, que tenía mono de leche.
Cómo crecen los jo?os, y cuando les cortas las melenas y las tiras al cubo, yo por si acaso, enseguida la cerraba por si se salían los trozos.
Y cuando lo estés cambiando y lo tienes todo espatarrao en el colador piensas "¿Me conocer?? ?Sabr? que soy su ama?
Pero lo peor no lo he contado. Que me perdonen las kefir?fagas.
Hay veces que se escapa un trocito y se queda en la leche que tenemos preparada para tomar. T? lo notas y te da un asco de no te menees, pero entonces caes en la cuenta de que lo que anteriormente te has tragado era otro trozo y te entra de todo. Porque claro, en el cuerpo calentito, crece más rápido y vas al servicio aunque no tengas ganas, sólo por si ya ha hecho el trayecto, y mientras estés sentada en la taza, pasan por tu mente mil imágenes de trozos de esponja saliendo del water a comerse tu chichi. Y se pasa mal.
