



Me alegro de que hayas tomado esa determinación, seguro que es para bien. Yo no puedo ayudarte porque en Madrid no conozco a nadie, pero te mando mi aliento, mi fuerza y mis deseos de que todo te salga redondo, tal y c**o tú te mereces.

No nos olvides, porque nosotras nos vamos a estar acordando mucho de tú, y ech?ndote de menos. M?ndanos alguna señal, aunque sea de tarde en tarde, y aunque sólo entres sólo para saludar. Y cuando ya estés centrada y te sea posible, regresa con nosotras y nos cuentas al detalle. Mucha suerte en esta nueva etapa, amiga.


