Tori, en verdad me has emocionado, y qué gran mujer debi? de ser tu madre, para hacerte sentir después de que ella ya no esté, el olor de su pelo, la caricia de sus manos, la ternura de sus abrazos, el consuelo de sus palabras y el ejemplo de sus acciones. Eso, afortunadamente, la mayoría de las madres lo saben transmitir, pero es una pena, que solo lo reconozcamos después de nos falten. Que estas Navidades, todos los que tenemos la suerte de tener a nuestras madres y padres, tengamos tambien la necesidad y el deseo de decirles: te quiero, que aunque lo sienten por nuestro cariño, pocas veces lo decimos.
Feliz Navidad a todos.
