Jump to content

Otro juego: adivina el libro

Puntuar este tema:


Recommended Posts


Re: Otro juego: adivina el libro

Eso es, Marianela, ¡bienvenida! :plas::plas::plas::plas::plas:

Aparece en el Juan de Mairena pero alguna vez he leído que realmente los padres de los Machado se conocieron así... parece raro que los delfines puedan remontar el Guadalquivir hasta Sevilla :nodigona:

Es tu turno :up:


Enlace al post
Compartir en otros sitios
  • Respuestas 1,9k
  • Creado
  • Última respuesta

Top Foreros En Este Tema

  • INMICA

    454

  • Aisen

    454

  • ilargi08

    193

  • juancarr

    185

Top Foreros En Este Tema


Re: Otro juego: adivina el libro

Pues aqui va una muy muy facil

«Te quiero, Maria. ¿Cuántas veces habría querido decírtelo?» Le cogió la mano y se arrodilló junto a la cama. Así pasó la noche, agarrado a la mano de su mujer, tiritando y sudando con ella, clamando al cielo con cada espasmo que sufría Maria.
La amortajó con la mejor de las sábanas que tenían y esperó a que pasara el carro de los muertos. No la dejaría en la calle. Él mismo la entregaría a los funcionarios. Así lo hizo. Cuando oyó el cansino repiquetear de los cascos del caballo, cogió el cadáver de Maria y lo bajó hasta la calle.
—Adiós —le dijo besándola en la frente.

:beso::beso::beso::beso::beso:


Enlace al post
Compartir en otros sitios

Re: Otro juego: adivina el libro

Una bandada de monjas cruzó la carretera y sus almidonados griñones revolotearon sobre sus cabezas
como las alas de las grandes aves marinas. Cuando atravesaron las grandes puertas de piedra de la
ciudad, gallinas y gansos abandonaron prestamente el sendero, aleteando y chapoteando en los charcos
de barro. Todas las mañanas las monjas se desplazaban por la niebla oscura que rodeaba el valle y, en
mudas parejas, se dirigían hacia el sonido de la grave campana que llamaba desde las colinas.
Designaban a esa primavera "Le Printemps Sanglant", la primavera sangrienta. Los cerezos habían
florecido temprano, mucho antes de que se derritieran las nieves de las altas cumbres. Sus frágiles ramas
caían hacia la tierra por el peso de los capullos rojos y húmedos. Algunos consideraron esa floración
prematura como un buen augurio, símbolo de renacimiento tras el prolongado y cruel invierno. Entonces
llegaron las lluvias frías y congelaron las ramas floridas, cubriendo el valle con una gruesa capa de flores
rojas salpicadas por las manchas marrones de la escarcha. Como una herida en la que se coagula la
sangre. Se consideró que esto era otro tipo de señal.


Enlace al post
Compartir en otros sitios

Re: Otro juego: adivina el libro

Este es un fragmento de un libro que me tubo muy enganchada.

La recién nacida, un bultito blanco de furia, era huérfana de madre. Y al principio, en la práctica, también fue huérfana de padre. George Angelfield se hundió. Se encerró en la biblioteca y se negó a salir. Quizá parezca algo excesivo; por lo general, diez años de matrimonio bastan para curar el afecto conyugal, pero Angelfield era un tipo extraño, como demostró en aquel momento. Había amado a su esposa, a su malhumorada, perezosa, egoísta y preciosa Mathilde. La había querido más de lo que quería a sus caballos, más incluso que a su perro. En cuanto a su hijo Charlie, un niño de nueve años, a George jamás se le ocurrió preguntarse si lo quería más o menos que a Mathilde, porque ni siquiera pensaba en Charlie.
:beso:


Enlace al post
Compartir en otros sitios

×
×
  • Create New...