Zira, piensa lógicamente. Toda acci?n tiene una consecuencia. Por ejemplo, si las acciones son:
-No preocuparse por tu salud ni la del beb? en el embarazo.
-Pasar ol?mpicamente del niño en sus pocos mesecitos de vida.
-No llamar siquiera para pregunatr por él.
-No ir a verlo.
-No acercarse a LA MADRE NI AL BEB? en el bautizo.
-No regalarle nada.
-Hablarle al hijo mal de la nuera y sin motivo alguno.
Siguiendo con el ejemplo, las consecuencias lógicas son:
-No nombrarlos padrinos del beb?, los padrinos, según la iglesia catúlica, son las personas que los padres eligen para que se hagan cargo del niño a ellos les pasa algo. Por ejemplo, mi ileg?timo y yo tenemos un ahijado precioso, su madre tiene seis hermanos y su padre tres, y todos se llevan bien, pero decidieron que nos querían a nosotros para su hijo si ellos faltaban. No tienes por qué elegir a la familia.
-No correr a ofrecerles ser padrinos si ellos ni han hecho míritos, ni se han ofrecido, ni se han preocupado, y lo mismo hasta se enteraron el día del bautizo de quienes eran los padrinos.
-Que su nieto pase de ellos ol?mpicamente cuando sea un poco mayor, actitud que ha visto hacia él.
-Que su nuera termine por no soportar ni verlos ni estar cerca de ellos. Esto repercutir? en que el marido-hijo se daré cuenta de muchas cosas y acabar? diciéndoles cuatro verdades.
-Que el marido-hijo sepa lo que es el amor, la preocupaci?n, el cariño de verdad, y compare lo que reciben él y el beb? en una y otra casa.
Y encima, los muy

se echarén las manos a la cabeza y dirán que todo fue por su mujer, que es mala malísima. No por ellos, por Dios, que tantísimo se preocuparon y ocuparon de su nieto y su hijo.
Zira, mi niña, no estés triste, es así y punto, no lo puedes cambiar. Son todos cortados por el mismo patr?n. Si yo te contara las lágrimas que derram? por lo mismo que tú... Y ahora me doy cuenta de que no vali? la pena, de que ellos no merec?an ni un sólo puchero mío. De que mi hijo nunca debi? verme llorar mientras le daba el pecho. No seas tonta, el día de hoy nunca volverá, y lo tienes todo para ser feliz: un beb? que muchos desean, una familia que te arropa y te quiere, y un marido que está contigo.

Cuántas lo quisieran.