Tenía ya ganas de preparar unos bombones rellenos de algo, no sabía bien de que, pero de algo rico que fuese semi líquido para que al morder se desparramara todo jajaja. Aún recuerdo unos bombones que nos traía mi chico a mi madre y a mi en navidad rellenos de licor que era todo un gusto. A nosotras nos encantaban y disfrutábamos mucho con ellos. Los que os traigo no son de licor, que ya tocarán ya, si no de toffe y están espectaculares. Si os digo la verdad ha sido un poco churro hacerlos, no les he prestado la suficiente atención y los he rellenado demasiado con lo que no me ha sido fácil cerrarlos. A la vista está jajaja porque en las fotos se ve como chorreaban. En fin, que da igual porque están (o estaban) igual de buenos.
Vamos cogiendo porciones de nuestra masa y la estiramos con el rodillo (Si se nos pega le espolvoreamos un poco de harina), la cortamos en rectángulos y le ponemos la crema de cacao encima, cerramos y dejamos el pliegue abajo
