Hace tiempo había visto la decoración de estas fresas en Pinterest y me encantaron!
Sumando a que había comprado el libro Objetivo: cupcake perfecto hace poco y que a Víctor le encantan las fresas, me puse con ello.
La única pega es que no era temporada de fresas y las que compré no eran muy allá pero ahora que si es temporada, tengo que repetir…
La masa del cupcake es del libro pero la crema no, no me terminan de convencer las cremas de mantequilla y esta de queso es deliciosa!
Elaboración Cupcakes:
Precalentamos el horno a 180º (160º si es con ventilador).
Preparamos la bandeja para cupcakes con 12 cápsulas de papel.
Picamos las fresas en trocitos chiquititos. Reservamos.
Tamizamos la harina con la levadura química en un bol y reservamos.
Batimos la mantequilla con el azúcar hasta que se integren y la mezcla se aclare. Añadimos los huevos, uno a uno, batiendo hasta que se incorporen.
Añadimos la mitad de la harina y batimos a velocidad baja hasta que se incorpore.
A continuación, añadimos la leche, mezclada con el extracto de vainilla, y volvemos a batir.
Añadimos la otra mitad de la harina y batimos a velocidad baja hasta que la mezcla sea homogénea. Incorporamos las fresas usando una espátula.
Repartimos la mezcla en las cápsulas, sin llenarlas más de 2/3.
Horneamos 22-25 minutos o hasta que un palillo salga limpio.
Dejamos templar 5 minutos en la bandeja y luego sobre una rejilla.
Elaboración Crema:
Montamos la nata y reservamos.
Batimos el queso mascarpone con el azúcar glass y añadimos la nata montada con movimientos envolventes.
Reservar en la nevera hasta que decoremos.
Decorar el cupcake con manga pastelera y boquilla tipo 1A de Wilton, con una fresa encima y la decoración como veis.
Notas: Sobra crema pero está deliciosa, congelé la que me sobró, en cuanto la descongele os cuento como queda.
Si no tengo 500 gr. de mascarpone, utilizo queso crema hasta llegar a los 500 gr.