Picas las pechugas en la picadora o las compras ya picadas algunas cantidades las puse a ojo en un bol lo mezclas todo tiene que quedar una masa manejable con una cuchara pequeña vas haciendo bolitas ayudándote con pan rallado para que no se te pegue la mezcla a las manos luego las pasas por el huevo y de nuevo por pan rallado dandolas la forma con un cortante las fries en la sarten con abundante aceite o en la freidora que no este a una temperatura muy alta para que se h
Si no queréis complicaros, pedís al carnicero que os abra las pechugas, especificando que son para rellenar, para que así las abra como un librillo, si no en casa con ayuda de un cuchillo bien afilado abrís las pechugas dejandolas lo más planas posible, podéis también golpear con un mazo de cocina o la palma de la mano para ayudaros a lograr el mismo grosor.
Cortar un trozo de film transparente de cocina, untarlo con aceite de oliva y colocar la pechuga encima. Aprovechad para salar la pechuga en el interior. Tampoco en exceso, puesto que el jamón va a aportar sal.
De
Hacía años que en casa no comíamos estos rollitos de pollo con mascarpone y salsa de manzana. La verdad es que no sé el motivo de por qué no los había vuelto a hacer. La cuestión es que, después del desastre del pastel de queso se me ocurrió hacerlos y publicarlos en el blog. También hace años que tengo pendiente colgar esta receta, o sea. que ya me ha venido bien.
Esta semana vengo con otra receta que seguro que os va a gustar, es sencilla, rápida y económica, unas alitas de pollo al horno con tomillo y romero, quedan muy buenas. Para una comida o cena informal quedamos muy bien y seguro que acertamos, a quién no le gustan las alitas bien tostaditas?
Aquí os dejo como yo las preparo, quedan riquísimasssssss. 
Qué toca hoy? «Alitas de pollo con soja y vino blanco».
En esta receta usaremos alitas de pollo, pero se puede hacer igual con pollo troceado, teniendo en cuenta que los trozos deberán ser similares para que se cocinen a la vez.
La idea surge como en casi todas mis recetas, con la misma pregunta. ¿Qué le puede ir bien? En este caso, el pollo casa con todo, pero quería hacer un plato rápido y sencillo, tenía a mano salsa de soja, y una botella de vino blanco empezada, y me dije probemos. El resultado es impresionante, como algo tan sencillo puede estar tan bueno. Cocines a quien se lo cocines acertarás s
Un pollo asado al horno con la piel crujiente y muy jugoso por dentro, acompañado de unas ricas patatas panadera y una salsa deliciosa y suave gracias a la sidra natural.
El cous-cous o cuscús, se denominaba antiguamente alcuzcuz, es un plato típico del norte de África, tradicional del Magreb. En árabe, esta palabra significa “la comida” y se suele cocinar casi a diario. La primera vez que aparece en un documento de cocina es en un escrito del SXIII, fue muy apreciado entre la población morisca en la época de Al-Andalus y se denominaba alcuzcuz, así se quedó en la cultura de nuestro país, incluso en el Quijote se menciona como comida muy apreciada. En la actualidad se suele servir como segundo plato, tras el tajine o el mechuí. Para tomarlo no se usan tradicionalmente los cubiertos, sino que realizan pequeñas bolas de sémola con las manos para seguidamente introducirlas en la boca. En cuanto la versiones que existen del cuscús son muchas y variadas, aunque todas tienen un punto en común, el cald
El sábado me apetecía probar una receta nueva para poner el pollo, y encontré esta que me llamó la atención por llevar miel y zumo de naranja. La verdad es que no nos defraudó, porque nos gustó a todos, grandes y pequeños. Rica rica y muy recomendable.
¿Quién dice que estando a dieta no se puede comer un rico y crujiente pollo frito?
Por supuesto que no es frito pero a que da el pego .
Cuando lo hice para probar no las tenia todas con migo ya que entre los comensales estábamos unos grandes amantes del pollo frito mas famoso , el de KCF aqui teneis mi versión.
Cuando lo saque a la mesa hubo quien lo miro de reojo y con recelo cogió un trozo , tenias que haber visto la cara de sorpresa cuando dio el primer mordisco